Octubre fue un mes negativo para la industria inmobiliaria, ya que tras cinco meses a la baja el Banco Central aumentó la tasa de interés para créditos hipotecarios, llegando a 4,32%. Al mismo tiempo, se agudizó la crisis financiera que atraviesa al sector de las constructoras e incrementó la incertidumbre en el rubro. Todo sumado al creciente valor de la UF, que trepó 329 pesos durante el mes anterior.

Ante este escenario, con un presente complejo para muchas inmobiliarias y constructoras, cabe hacerse la pregunta, ¿es momento para adquirir bienes raíces o es mejor esperar?

Efectivamente estamos en un momento complicado para poder adquirir una propiedad, sin embargo, justamente por lo mismo, dependiendo de la oportunidad que se presente puede  ser una opción adquirir un bien raíz, a pesar de que las tasas hayan presentado un alza. Así, por ejemplo, pueden encontrarse propiedades por debajo del valor comercial ante la necesidad de los propietarios de vender sus inmuebles o bien se puede negociar un buen precio para la adquisición.

Lo anterior resulta aún más conveniente si se mantiene un buen porcentaje de ahorro para la compra y se cotiza la mejor alternativa de crédito hipotecario en la industria financiera. Ahora, si se compra el bien raíz al contado, es aún más conveniente ya que el poder de negociación del comprador es mayor porque implica un proceso mucho más rápido, en donde el vendedor puede obtener el pago en un muy breve plazo.

Otra pregunta que debemos hacernos es, ¿en qué cosas hay que fijarse si es se decide adquirir una propiedad? Una vez que ya se tiene elegida una alternativa de compra, hay que tratar de negociar una tasa conveniente en el banco, así como negociar un buen precio con el vendedor. Para ello, también es posible complementar renta con otra persona (cónyuge o familiares por ejemplo) para efectos de obtener un financiamiento más conveniente que permita bajar el monto del dividendo y/o el plazo del crédito.

Por otro lado, también hay otras alternativas para financiar la compra de una propiedad, como por ejemplo las mutuarias o a través del leasing habitacional, sin embargo, no resultan más convenientes que el crédito hipotecario ofrecido por los bancos.

La industria en la actualidad está mostrando una desaceleración, algunas inmobiliarias ya han comenzado procesos de liquidación concursal y las tasas para los créditos hipotecarios aún están lejos de llegar a los niveles que tenían años atrás, sin embargo, si se cuenta con el dinero en efectivo para la compra, o se tiene un ahorro considerable y se mantiene un buen nivel de renta, es posible encontrar buenas oportunidades, sobre todo de viviendas usadas. También en el tema de las tasas, es conveniente cotizar en al menos unas tres instituciones para optar por la mejor alternativa.

Ahora bien, si no se cuenta con un buen pie para la compra y es necesario tomar un crédito cuya tasa no es la más conveniente, es preferible esperar y ahorrar un mayor monto, sobre todo también por el incremento sostenido del valor de la UF.

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público.