El análisis encontró una relación entre las áreas verdes y una menor frecuencia de trastornos de salud mental.

Una investigación dirigida por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), descubrió que los residentes de la ciudad española tenían mejores marcadores de bienestar mental cuando su situación vital cumplía ciertos criterios de acceso a zonas verdes.

Aunque, menos del 5% de los residentes de la ciudad disfrutaban realmente de ese acceso.

Para realizar el estudio, los investigadores recurrieron a una medida sugerida por otro estudio de 2021, en donde se estipulaba la regla “3-30-300”. Esta quiere decir que, toda persona debiera al menos poder:

  1. Ver 3 árboles desde su casa
  2. Vivir en un barrio con un 30% de árboles
  3. Contar con un parque a menos de 300 metros de su casa

El estudio de ISGlobal

Los investigadores encuestaron a 3.145 personas de entre 15 y 97 años que participaron en la Encuesta de Salud de Barcelona de 2016 a 2017. Descubrieron que los encuestados cuya convivencia cumplía los tres requisitos de la regla tenían mejor salud mental, utilizaban menos medicación y visitaban con menos frecuencia al psicólogo o psiquiatra.

Sin embargo, solo la relación entre el cumplimiento de los tres requisitos y las visitas al psicólogo fue estadísticamente significativa.

Los investigadores también analizaron los tres componentes de la norma por separado: visibilidad de los árboles, zonas verdes del barrio y acceso a parques. Descubrieron que las personas con barrios suficientemente verdes tenían una salud mental significativamente mejor.

Otro hallazgo del estudio fue que la mayoría de los barceloneses no tenían acceso a estos beneficios. Sólo el 4,7% de los encuestados cumplía los tres criterios, algo más del 43% tenía tres árboles a menos de 15 metros de su vivienda, el 62,1% cumplía el requisito de parque, pero sólo el 8,7% vivía en un barrio con suficiente arbolado, que era el componente individual más beneficioso de la norma según los resultados del estudio.

Mundo Parcelas: “Muchos prefieren abandonar la capital para vivir en zonas rurales”

En relación a la situación en la capital chilena, Juan Fonseca Vargas, director de Mundo Parcelas sostiene: “Lo cierto es que hoy en día en Santiago quedan pocas áreas verdes cercanas a las viviendas. Solo algunas comunas cumplen con el estándar internacional”.

Respecto al dato que menciona Fonseca, un estudio de 2019 realizado por el Observatorio de Ciudades de la UC lo avala. Según esa investigación, solo las comunas de Las Condes, Providencia, Peñalolen, Vitacura, Lo Barnechea y Ñuñoa cuentan con más del 70% de superficie de masa verde.

Por otro lado, ninguna de las otras comunas cumple con el estándar mínimo, siendo los peores casos el de Lo Espejo, Renca y El Bosque, en donde el porcentaje de superficie verde no supera el 27%.

En este sentido, Juan Fonseca explica que muchos de los clientes de Mundo Parcelas han optado por cambiar su estilo de vida y vivir en algún lugar lejos de las grandes ciudades.

“Se ha producido una situación en donde muchos prefieren abandonar la capital para vivir en zonas rurales, ya que se han dado cuenta de que es más barato y que otorga una mayor conexión con la naturaleza. Esto claramente aporta a la salud mental, ya que usualmente los terrenos rurales cuentan con mayor espacio para tener una vida familiar más plena y disfrutar de un aire limpio”, señala Fonseca.

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