La exhibición rinde homenaje a la vida y obra de Laura Rodig, destacada artista visual chilena, y su estrecha relación con Gabriela Mistral. La muestra, se presentará en la Sala Lagar del Museo Gabriela Mistral de Vicuña durante todo el mes de junio.
El Museo Gabriela Mistral de Vicuña se convierte en epicentro de esta exhibición que celebra el legado de Laura Rodig, reconocida pintora, escultora, ilustradora y educadora chilena. Bajo el título “Laura Rodig: Obras para Gabriela”, esta muestra invita al público a descubrir a la artista, la educadora y la persona; y el vínculo íntimo que existió con la aclamada autora elquina Gabriela Mistral, a quien acompañó desde Los Andes hasta México.
La exposición “Laura Rodig: Obras para Gabriela” es el resultado de una colaboración conjunta entre el Museo Histórico Gabriel González Videla y el Museo Gabriela Mistral de Vicuña. La muestra se erige como un encuentro necesario con el arte de una mujer cuyo legado continúa expandiéndose en la historia de Chile.
Laura Rodig Pizarro (Los Andes, 7 de junio de 1901 – Santiago, 30 de octubre de 1972) fue pintora, escultora, docente, ilustradora y activista. Es considerada como una de las artistas chilenas más interesantes de su generación, vinculada con la vanguardia intelectual y política latinoamericana. Fue una de las pioneras en la didáctica para museos. Además de perfeccionar su propio arte y docencia, se destacó por su compromiso en causas sociales y políticas, lo cual la llevó a ser perseguida durante el gobierno de Gabriel González Videla bajo la vigencia de la conocida “Ley Maldita”, que proscribió al Partido Comunista y a sus seguidores.
La curadora del Museo Nacional de Bellas Artes, Gloria Cortés Aliaga, describe a Laura Rodig como “educadora, docente y maestra rural, promotora de exposiciones infantiles, ilustradora y fundadora del área de Educación en el Museo Nacional de Bellas Artes, donde trabajó hasta sus últimos días, Rodig fue parte del proyecto modernizador del sistema educativo, tanto en Chile como en el México posrevolucionario (…) Su agenciamiento político en todo su quehacer se resume en el mensaje que envía a Gabriela Mistral en 1945, luego que esta recibiera el Premio Nobel de Literatura: ‘Lo que el alma hace por su cuerpo es lo que el artista hace por su pueblo’, frase que da nombre a la presente exposición y constituye el epitafio de la tumba de la poeta en Montegrande”.