- Tras la entrada en vigencia de la Ley N° 20.920 de Fomento al Reciclaje y Responsabilidad Extendida al Productor (REP) en el país, se abren diferentes retos para los productores e importadores de productos considerados prioritarios.
El 17 de mayo se celebra el Día Internacional del Reciclaje, fecha en la cual cabe preguntarse cómo hemos avanzado en el país. Tras la entrada en vigencia de la Ley REP, en marzo pasado, con la publicación en el Diario Oficial del reglamento para el reciclaje y valorización de envases y embalajes, los fabricantes deberán organizar y financiar las gestiones de los residuos de sus productos.
La normativa establece que todos los productores o importadores de productos prioritarios -aceites lubricantes, aparatos electrónicos, baterías, pilas, envases, embalajes y neumáticos- deben hacerse cargo de los residuos que generan. De esta forma, estos desechos deben volver al lugar en el que fueron fabricados o desde donde se distribuyeron. A raíz de esto, se establecen metas de recolección y valorización según cada producto.
Antes de la normativa, la producción industrial pasaba por alto las consecuencias negativas que tenía para el medioambiente. Sólo se encargaban de elaborar, procesar e industrializar sus productos.
La iniciativa plantea una nueva manera de gestionar los residuos, previniendo y valorizando los residuos en todos sus aspectos. Especialmente, porque una incorrecta gestión de residuos puede generar contaminación visual, alteración de la calidad del aire y contaminación de los suelos y del agua.
Durante la crisis sanitaria producto del COVID-19, el cuidado del medioambiente se ha vuelto clave, y con ello la gestión de los residuos peligrosos y no peligrosos. Mauricio Quezada, socio de Ecoven, startup de reciclaje chilena a través de máquinas dispensadoras de botellas plásticas y otros materiales, indica que “la ley representa distintas metas que deben cumplir las empresas generadoras, lo que sin duda trae un gran desafío en estos tiempos, sobre todo, en pandemia”.
Según el informe “Perspectiva de la Gestión de Residuos en América Latina y el Caribe” de ONU para el Medioambiente, en América Latina y el Caribe se generan 541.000 toneladas de residuos urbanos al día. Se cree que esta cifra aumentará un 25% para 2050. Además, el 90% de los residuos no se aprovechan y 40 millones de personas no tienen acceso a la recolección de residuos.
Es por esto que es tan importante prevenir los impactos de una inadecuada o inexistente gestión de residuos. Es necesario, entonces, diseñar e implementar políticas y estrategias públicas apropiadas; definir un soporte institucional con adecuados marcos regulatorios; utilizar tecnologías disponibles para toda la ciudadanía; y usar indicadores de gestión y mecanismos de educación y comunicación que permitan su integración y sostenibilidad.
Recolección y segregación
Existen diversas empresas que se encargan de realizar el transporte y traslado de los distintos materiales a las empresas y plantas encargadas de procesar los materiales reciclables, las cuales cuentan en general con permisos ambientales y sanitarios, además de un equipo de personas capacitados para esta tarea.
Sin embargo, el reto “no radica tanto en el transporte en sí, porque hay varias empresas que se encargan de esto, sino que de la correcta recolección y segregación”, dice el socio de Ecoven, que cuenta con máquinas recicladoras y una app en la que los usuarios pueden acceder a premios y descuentos cuando reciclan en los contenedores.
Este escenario provoca varias complicaciones para las empresas. Quezada explica que “estas tendrán que enfatizar y destinar mayores recursos a la correcta recopilación, una vez que se logren los índices de recolección, el transporte será abordado y amortizado por los distintos volúmenes”.
Desde Ecoven explican que apoyan y realizan la segregación en origen en distintas empresas y plantas productoras para incrementar las tasas de recolección. Enfatizan que la adecuada separación de residuos es muy relevante en la búsqueda de una efectiva gestión de desechos, evitando la mezcla de materiales.