- Muchas fuentes de trabajo se han generado durante la pandemia a raíz de la necesidad de comprar sin salir de la casa, aunque lo que no está claro es qué ocurrirá con estos puestos a futuro una vez superada la emergencia. Según Drivin, una de las claves será la reinvención de los trabajadores al interior de las organizaciones.
A raíz de las restricciones de movilidad y cuarentenas, millones de personas a nivel mundial entraron en el comercio electrónico. Muchos de ellos utilizaron los canales digitales por primera vez y otros aumentaron sus habituales adquisiciones vía Internet, utilizando estas plataformas para comprar alimentos, medicamentos, ropa, y regalos, entre otros.
En este contexto, el auge de los despachos ha impulsado los empleos en este sector económico, lo que se ve ratificado en el estudio Job Market Insights de Robert Walters, que revela que las ofertas laborales en la industria logística crecieron un 85% el año 2020 en comparación con 2019. Los cargos con mayor crecimiento fueron los de distribución, atención al cliente, reponedores y despachadores. Luego de esta subida, la consultora espera que este el 2021 permanezca estable.
Nicolás Kunstmann, co-founder de Drivin, -(www.driv.in) dedicada a optimizar las rutas de despacho con un uso intensivo del transporte- analiza este fenómeno de las fuentes de trabajo generadas durante este tiempo en Chile y proyecta si esta tendencia seguirá ocurriendo a futuro o si es algo momentáneo por la emergencia sanitaria.
“No sabemos qué va a ocurrir a futuro con esta gran cantidad de empleos que ha aumentado en este sector producto de la pandemia y de la necesidad de comprar vía comercio electrónico. Si bien, es cierto que existe consenso que el e-commerce se va a mantener y esto llegó para quedarse (los cambios de hábitos continuarán de forma similar), hay que analizar qué pasará con la tecnología, ya que las empresas para enfrentar la contingencia tuvieron que suplir la falta de tecnología con gente”, explica el ejecutivo.
El asunto, según plantea el experto, “es que ha pasado un año desde el comienzo de la crisis sanitaria, por lo que las empresas comenzarán a tecnologizarse y robotizar un montón de procesos que hoy son realizados por personas. En este contexto, la gran interrogante que tenemos para los próximos cinco años es entender si ese incremento de demanda de trabajadores se mantendrá en el tiempo o disminuirá en la medida que las empresas utilicen más tecnologías en tareas como picking, almacenamiento, software de última milla y otros servicios”.
Para finalizar, el especialista enfatiza en la necesidad de que las personas que trabajan en esta industria vayan capacitándose y aprendiendo nuevas habilidades y conocimientos dentro de sus labores para adaptarse de mejor forma a la llegada de la tecnología e innovación, en que claramente se necesitarán menos personas en funciones que serán robotizadas o automatizadas.
“Lo seguro es que la industria seguirá manteniendo un buen ritmo de crecimiento, pero es más incierto lo que pasará con esos empleos generados en pandemia. Esperamos que las personas puedan seguir en estos puestos de trabajo, reinventándose, capacitándose o teniendo otras funciones en la cadena logística”, concluye.