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Leonel Fritis
Durante esta temporada estival el aumento de personas que se instalan de forma ilegal en el borde costero para comercializar sus productos ha llamado la atención de transeúntes y locatarios, quienes piden mayor fiscalización para erradicar a los ilegales. Las autoridades coinciden en que se trata de personas muy agresivas, sin embargo aseguran que se están tomando las medidas para sacarlos de las calles.

No es novedad que aparezca el comercio ambulante en sectores de la ciudad donde hay un alto flujo de público, esta temporada una de las zonas donde su crecimiento ha sido explosivo es en el borde costero, lugar donde se han instalado ambulantes con todo tipo de productos para comercializarlos, sin autorización ni los permisos respectivos, a los visitantes del lugar.

Hace unos años atrás existían, pero eran en menor cantidad, generalmente vendiendo productos artesanales en una manta en el suelo. Sin embargo el escenario actual es muy distinto, se instalan con mesas y sillas, usan las barras de ejercicio como percheros para colgar ropa, incluso venden comida preparada dentro de los vehículos, una situación que pese a las rondas y controles preventivos solo parecieran ir en aumento.

“Si el año pasado habían solamente artesanos, hoy día hay gente que hace comida en el lugar, hay cero control del Servicio de Salud, ruidos molestos, cero participación de la Seremi del Medioambiente, en este minuto han dejado solo al municipio para luchar con todo esto, es demasiada gente” dijo crítica la delegada municipal de la Av. del Mar, Gloria González.

El encargado de seguridad ciudadana de la Municipalidad de La Serena, Gonzalo Arceu manifestó que muchos comerciantes ilegales, producto de la contingencia social, se habían trasladado desde el centro de la ciudad a otros sectores como la Av. del Mar.

El Faro y desde Cuatro Esquinas al sur, especialmente donde se ubican las letras de La Serena, hasta la altura de calle Los Membrillos son los puntos donde más se concentra este tipo de comercio.

“Nosotros hemos organizado operativos con Carabineros PDI, inspectores municipales para controlar esto pero la verdad es que la gente que está ejerciendo el comercio es muy agresiva y dificulta un poco la labor y, para no tener problemas mayores ni tener enfrentamientos, más bien se hace una labor preventiva informándoles que no pueden estar ahí” agregó Arceu.

Dice que han cursado multas, tanto a vendedores como a quienes compran a ilegales de acuerdo a la ordenanza municipal, sin embargo “una vez que los fiscalizamos se trasladan a la arena y como es jurisdicción de la Armada se dificulta el control”.

La situación del comercio ambulante es una problemática que aqueja a las autoridades, quienes a lo largo de los años han buscado diversas estrategias para intentar erradicarlo, sin embargo pese a los esfuerzos pareciera ser un tema de no acabar.

La agresividad también es un tema preocupante, ya que además del crecimiento explosivo del comercio ambulante, una de las características este año ha sido la agresividad con que actúan los ilegales, especialmente durante las fiscalizaciones tanto de Carabineros como de Inspectores Municipales.

“Se adueñan además de los espacios y si uno ocupa el espacio de otro y no se quiere ir se arman las peleas y las riñas, es un tema muy parecido a lo que ocurre en el centro” manifestó la delegada municipal, Gloria González.

Las discusiones y riñas entre los mismos ambulantes son habituales, allí cada uno protege su lugar y las peleas para quienes se atreven a desafiarlos son cosa seria, cuentan desde la delegación municipal de la Av. del Mar.

“El usuario de la avenida del Mar igualmente los apoya, cuando han venido a hacer operativos, decomisos, la gente se le va encima al personal de Carabineros, ha habido enfrentamientos con Carabineros, con los inspectores, por defender a esta gente” añadió González.

Competencia desleal

Quienes se han visto perjudicados son los locatarios del comercio establecido, principalmente negocios pequeños que cuentan con todos los permisos al día y trabajan de forma legal.

Uno de esos lugares es la Feria Artesanal Brisas del Mar, ubicada al sur de Cuatro Esquinas, es la feria que queda justo en frente de donde se aglomera el comercio ilegal.

Allí los locatarios han sufrido una disminución de ventas, ya que aseguran que los ilegales venden sus productos mucho más baratos y la gente los prefiere, lo que les molesta, puesto que deben pagar patentes, arriendos, IVA y los sueldos de sus trabajadores, produciéndose una competencia injusta y desleal.

Luciano Gómez del Food Truck de churros de la feria manifestó que este año las ventas han disminuido un 40% respecto a la temporada pasada, que se requiere con urgencia presencia de más inspectores por el exceso de comerciantes que llegan a la playa.

Asegura que tras el estallido social las personas les perdieron el respeto a Carabineros y los inspectores municipales, especialmente durante los controles, además los ambulantes cuando ven presencia de las autoridades simplemente bajan al sector de la arena donde la jurisdicción es de la Armada de Chile.

Misma opinión mantiene Maritza Tobar de Martobar Turismo y Artesanías, quien manifestó que había indignación entre los mismos locatarios por la alta presencia de los ilegales, indicó que comenzaron a llegar los primeros días de enero pero aumentaron considerablemente en la segunda semana, asimismo alega que durante la tarde y noche la presencia de Carabineros es muy baja.

Operativos preventivos

“Entiendo el sentir de los vecinos, este comercio ambulante no se ha visto en situaciones anteriores pero es producto de la situación extraordinaria que está viviendo el país” indicó por su parte el Gobernador de Elqui, Gonzalo Chacón.

La autoridad además es quien lidera la mesa de trabajo para atacar esta problemática y explicó que hace unas semanas vienen manteniendo reuniones con diversos organismos para aminorar la situación, sin provocar conflictos y tratando de contener los niveles de violencia.

“Hicimos un operativo la semana pasada donde algunos comerciantes fueron bastante agresivos, se notó el ánimo complicado que se está teniendo en la Av. del Mar producto de los ilegales, por lo tanto estamos buscando los distintos focos para no tener ningún tipo de enfrentamientos, pero a la vez poder ir disminuyendo este comercio ilegal que afecta al comercio establecido” agregó la autoridad.

Declaró que su principal prioridad es la contención de la violencia, por lo mismo, y por la agresividad de los comerciantes, es que las rondas han tomado un carácter preventivo con tal de no provocar enfrentamientos, especialmente en un sector turístico.

Por su parte, el Prefecto de Coquimbo, Comandante Carlos Rojas, dijo que Carabineros mantiene un servicio constante en la Av. del Mar, tanto con personal territorial como de Santiago y que su labor es mayormente preventiva, prestando apoyo a los inspectores en el control del comercio ambulante.

“Hasta la fecha llevamos más de 57 infracciones y la verdad es que esas personas son muy agresivas al momento del control y la fiscalización de inspectores como de Carabineros”.

Respecto a ese tema, el Prefecto diferenció a aquellos comerciantes que venden ilegalmente por necesidad de trabajo y quienes lo hacen para reducir especies robadas, estos últimos son quienes actúan con más violencia frente a las autoridades.

“Lamentablemente el turista solidariza mucho con estas personas lo que trae como consecuencia que se ensucia la imagen de la Av. del Mar” agregó.

Sensación de abandono

Una inquietud que sienten parte de los locatarios de la Av. del Mar y en la misma delegación municipal, es la sensación de abandono de Carabineros y las autoridades respecto al tema de los vendedores ambulantes, ya que ven como cada noche, con impunidad y descaro, se instalan frente a negocios que cuentan con los permisos correspondientes.

“Es una percepción que pueden sentir pero nosotros realmente estamos muy preocupados por el comercio ambulante, la seguridad en todo el borde costero, entendiendo el turismo que implica y nosotros tomamos medidas excepcionales en cuanto al tema de las marchas, de los desmanes que pueden haber y por supuesto con el comercio ambulante” explicó Chacón.

Cámara de Turismo

La postura de la Cámara de Turismo de la Región de Coquimbo fue bastante crítica al respecto, su presidenta, Laura Cerda, señaló que mientras no hubiera una visión sustentable y estratégica del turismo que se quiere construir como comuna, región y como país, el comercio ambulante seguiría siendo un problema que no solo afecta al turismo, sino también en lo social, cultural y económico.

“Se entra en el cuestionamiento de los derechos a trabajar, el que compartimos ampliamente, pero no en estas condiciones, donde no hay un ordenamiento, un catastro real de quienes son, no hay un control ni están enmarcados en una política de aporte de atractivo al que nos visita. Es muy muy distinto un lugar que sea bien presentado”.

Agregó que “estamos hablando de una ciudad reconocida internacionalmente como un destino de patrimonio y cultura, entonces ¿de qué estamos hablando? Súmale a eso los “cuidadores de autos”, hemos tenido denuncias concretas de cómo se pelean su territorio con arma blanca y todo lo que eso involucra”.

By Editor

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