A partir del 11 de noviembre las bicletas serán consideradas como un medio más de transporte ante la ley.

El próximo 11 de noviembre entrará en vigencia la nueva Ley de Convivencia Vial, normativa que entre otras cosas, reconocerá a las bicicletas como un medio de transporte más y establecerá el uso obligatorio de ciclovías y cascos.

Luego de tres años de intensa tramitación legislativa, la Ley fue promulgada en marzo pasado gracias al apoyo y la convergencia de más de 100 organizaciones, instituciones y universidades, agrupadas en la Red Nacional para la Convivencia Vial, que respaldaron la iniciativa.

“La bicicleta siempre ha estado de una u otra forma en la ley de tránsito, pero lo importante era señalarla como tal. Hay muchos titulares de que “ahora” están prohibidas ciertas cosas, pero la realidad es que eso siempre ha sido así” comenta a Publimetro Daniela Suau, parte del Colectivo Muévete, que forma parte de esta Red Nacional.

“El espíritu de la ley tiene que ver con eso, que al inscribirla es entender que el uso de la calle no le pertenece a los motorizados y que quede claro que tenemos que convivir entre los distintos modos en que habitamos la ciudad. peatones, ciclistas, vehículos y otros rodados”, recalca.

De esta forma, la ley crea la categoría de CICLOS, y agrupa en un capítulo especial todas las normas relacionadas a bicicletas, triciclos, patines y patinetas, bicitaxis, cargobikes y otros.

MULTAS

De esta forma, esta nueva regulación en la convivencia vial buscará poner fin a los conflictos existentes entre peatones, ciclistas y automovilistas o en otras palabras, significará una “división más justa” de los espacios viales, según comenta Bernardo Bacigalupo, experto en transporte urbano y director comercial de All-Ride.

“La normativa viene a establecer normas claras de carácter formal, estableció deberes y derechos para todos”, complementa Álvaro Miranda, experto de la Escuela de Transportes de la Universidad Metropolitana Tecnológica.

Respecto a las restricciones, serán pocos los ciclistas que podrán transitar por las veredas sin arriesgar una multa; niños menores de 7 años acompañados por un adulto, menores de 14 años que circulen solos y personas de la tercera edad o que tengan movilidad reducida.

Quienes estén dentro de esta “excepción” a la regla “podrán circular excepcionalmente por aceras adecuando su velocidad a la de los peatones, y respetando en todo momento la preferencia de éstos, cuando no exista una ciclovía”, indica la Ley.

En tanto, el grueso de los ciclistas tendrá que transitar por la pista derecha de la calzada (junto a los vehículos) o bien, por las ciclovías habilitadas. Al respecto, desde el Colectivo Muévete aclaran que “Chile efectivamente hoy cuenta con una infraestructura que no es suficiente, en el entendido de que al menos 1 millón de los viajes diarios en hora punta se realiza en bicicleta (según la encuesta Origen Destino) y desde ese punto de vista, entendiendo que muchas personas se sienten más seguras en una estructura, estamos al debe”.

Pero recalcan que la cuestión es el cómo se comparte este espacio “los ciclistas tenemos tanto derecho en la calle como los automovilistas, salvo en las que hay ciclovías”. “Los automovilistas ahora tienen que integrarlo y respetar, entregando espacios que antes no estaban claros”, complementa el experto de la Utem, Álvaro Miranda.

Las infracciones por no respetar la nueva normativa irán entre las 0,2 y 0,5 UTM, o sea, entre los 10 mil y 24 mil pesos aproximadamente.

CICLOVÍAS

Según dicta la nueva ley, las ciclovías que no cumplan con los estándares que dicta el Manual de Diseño y Construcción de Ciclovías publicado por Minvu en 2015, tendrán tres años para ser modificadas.

“El gobierno actual habla de 800 kilómetros de ciclovía que es casi triplicar el kilometraje actual, pero más importante me parece que se cumpla con el estándar de calidad”, argumenta la ciclista del Colectivo Muévete.

Y claro, si bien en Santiago Centro existen ciclovías que cumplen con este índice de calidad, hay otras que no están tan cerca de hacerlo. Ese es el ejemplo de esta ciclovía de Chillán, que al término de su recorrido tiene apostada un “incómoda” banca:Ver imagen en Twitter

Ver imagen en Twitter

De los mismos creadores del puente Cau – Cau , ahora nace la Ciclovía con salto mortal incluida

PROYECCIÓN

Si sólo en 2017 se produjeron 3853 accidentes de tránsitos que involucraron bicicletas, ya sea por imprudencias, mal uso de veredas o falta de protección, luego de entrar en vigencia esta ley se espera un claro descenso en la cifra.

“Definitivamente va a ayudar, pero el impacto va a aumentar en el tiempo a medida de que todos seamos más responsables”, reitera el experto en transporte urbano e indica que el llamado es a “acostumbrarse a estar más atentos y respetar los espacios de los ciclistas”.

Y ¡ojo! a evitar multas, pues ambos expertos coinciden en que la fiscalización será más eficiente y sencilla que incluso, la que se imparte a los automovilistas.

By Editor

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público.